#45 Sobre Tatum y Jaylen, una llamada y años de odio narrativo

Siete años juntos, Jaylen Brown y Jayson Tatum son la cara de los Celtics y la cruz de ESPN.

En el cuarto partido de la serie ante Cleveland Cavaliers, en semifinales de conferencia, Jaylen Brown metía un triple que hacía de daga para la franquicia de JB Bickerstaff. Y mientras protestaba al colegiado, aparecía de la nada un gancho de mano izquierda que le dejaba el pecho temblando. ¿Marcus Morris? ¿Evan Mobley? No, Jayson Tatum. El golpe fue tan sorpresivo que Brown se quedó en shock por un momento, antes de volver a su protesta ante Tyler Ford. “Se la voy a devolver”, amenazaba Jaylen Brown. Y apenas 48 horas más tarde lo hacía. Triple de Tatum en el quinto y definitivo, Cavaliers a la lona y tras felicitarle, Brown vuelve a su compañero y entre risas, le golpea en el pecho antes de fundirse en un abrazo. ¿Se odian las estrellas de los Celtics? Hablemos de cuánto.

Jaylen Brown (27 años) y Jayson Tatum (26 años) son desde hace más de un lustro las dos referencias de los Boston Celtics. Viajes diferentes, con un mismo punto de partida y buscando un final similar, son dos personalidades como el día y la noche pese a compartir vestuario, posición y decepciones. Juntos han ganado el 65.3% de los partidos en temporada regular y 62-40 en playoffs, han pisado cinco veces las finales de conferencia, han aguantado veranos de rumores y horas y horas de televisión pidiendo su ruptura. Porque se odian, porque no se hablan, porque Jayson Tatum no celebró lo suficiente que Jaylen Brown se llevara el MVP de las finales del Este hace cinco días. O al menos eso han querido vender, a falta de narrativas hasta que empiecen las finales el seis de junio. 

Para entender la relación de Tatum y Jaylen hay que irse casi una década atrás en el tiempo. Antes de que cualquiera de los dos fuera elegido en el draft incluso. La primera vez que se conocieron fue en 2014, hace una década, en el Under Armour Elite 24. Un campamento para futuras estrellas NBA donde también estuvieron Donovan Mitchell, Brandon Ingram, o jugadores que apuntaban a serlo como Dennis Smith Jr o Josh Jackson, por ejemplo. En el campamento compartieron habitación y desde entonces, la amistad ha ido creciendo a tal nivel que Jaylen Brown es clave para entender la llegada de Jayson Tatum a los Boston Celtics. Danny Ainge y Jaylen (y los Philadelphia 76ers), si no a partes iguales, tienen responsabilidad en su aterrizaje en Massachusetts. 

Tras su año de novato y sus primeras finales de conferencia, Brown se fue a pasar parte del verano a Córdoba (todavía tiene la chaqueta del club de fútbol) en una serie de eventos promocionales de la NBA. Y uno de sus mejores y peores recuerdos al mismo tiempo llegó la noche antes del draft. “El día antes, Danny me llamó y me preguntó por el pick. Y le dije ‘Jayson es ese jugador’” explicaba Brown en Andscape. Lo que Ainge no tuvo en cuenta es que en España eran las dos de la madrugada. “Pensé que me iba traspasado, la verdad. Solo quería saber sobre Tatum”. Porque en esos momentos, la gerencia de Boston dudaba entre JT o Josh Jackson. Por suerte eligieron bien y en 2017 volvían a ser compañeros. Su debut juntos sería apenas 10 días más tarde y estos son los highlights.

Tatum clutch, Jaylen anotando en transición, los Celtics ganándole a un rival directo remontando un partido. El guion estaba escrito:

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